Valoración

Toda intervención se hace tras un estudio de las fortalezas y necesidades de cada persona, por ello es necesario una valoración inicial que nos permite proponernos objetivos de trabajo específicos e individuales de cada persona.

Para ello se realiza una entrevista a todos los miembros implicados en el proceso, así como la aplicación de pruebas psicopedagógicas y neuropsicológicas, que ayuden a desarrollar un programa de intervención ajustado a las necesidades específicas de cada persona.